About Me

Medellin, Colombia
Pensar, imaginar, expresar, plasmar, figurar, opinar…la simpleza hace parte de mi vida, con ella soy capaz de llenar vacíos insólitos, de alegrar momentos amargos, de apreciar lo que significan las letras, de volar en mundos extraños por medio de palabras escuetas…existen miles de rarezas que engrandecen mi existir, con ellas inspiro mi alma, inspiro mi ser…por ellas soy lo que soy, por ellas me apasiono por lo que hago, lo que siento, lo que vivo cada instante en que las letras, la fotografía, la música, las imágenes, los chocolates, los colores, pasan por mi lado para hacerme creer que hay en el mundo experiencias inigualables, prescindibles, especiales…

martes, 22 de enero de 2008


RESURGIENDO DEL AVISMO
Tras una larga espera, por fin volvieron a ser libres. El cansancio y la agonía por la que pasaron tantos años en cautiverio ahora no importaban, porque la luz del día ahora iluminaba un nuevo camino para recorrer.

Las voces silenciadas por un arma de fuego, cobran nuevamente su color para enseñar al mundo lo que fue su vida tras caminar incansablemente en medio del monte espeso, tras sentir que su final estaría por llegar en un lugar recóndito del país, sin darles esperanza de regresar para abrazar a los suyos.

Las gracias no se hacen esperar, y un beso se vuelve más expresivo que mil palabras. El mundo está conmocionado y espera tener más respuestas positivas en un país donde la violencia, el secuestro, el narcotráfico y la corrupción se han vuelto comunes para todos. Pero, ¿alguien se ha puesto a pensar que nos hemos ido acabándonos por nuestra propia indiferencia? Por ahora, creo que no.

Desde pequeños nos hemos acostumbrado a ver en todos lados que nuestro país esta al borde del abismo y hemos crecido quejándonos, resentidos porque no podemos poseer la tan anhelada paz.

Tras observar lo sucedido, algunos continúan peleando y criticando, mientras otros guardan la esperanza de tener una salida. Sin embargo, el dolor sigue magullando las heridas del corazón. Nadie ha interiorizado que la respuesta está en que nosotros nos liberemos de las cadenas que atan nuestro existir a la indeferencia, a la cobardía, a la injusticia, a la indolencia.

Nos hemos encerrado nosotros mismos en ideas sin sentido, mientras que el mundo sigue derrumbándose a pedacitos allá afuera sin que nadie haga nada por ello.

El grito de protesta es la voz de fortaleza de aquellos a quienes les han arrebatado un ser querido, no obstante el resto de Colombia sigue mirando aterrorizado las imágenes que pasan en los medios de comunicación, esperando que alguien mueva un dedo para llegar a un acuerdo.

Aún no he logrado entender cómo en Colombia se nos ha hecho costumbre decir que sentimos el dolor ajeno cuando realmente lo que hacemos es hablar por hablar, porque todo lo volvemos dramático para captar la atención de los demás sin llegar a tener una idea mínima del daño que podemos causar.

Es cierto que el país ha logrado tener un minuto de suspiro por la liberación de Clara y Consuelo, también es cierto que la felicidad nos ha inundado porque Emmanuel está bien y podrá crecer al lado de su madre y que gracias a esto el año augura un nuevo porvenir para Colombia.

Pero no nos quedemos sentados expectantes a lo que pueda suceder más adelante, mirémonos a nosotros mismos para generar el cambio, escribamos una nueva historia donde riamos de nuestras penas y lloremos de alegría por vivir en un país maravilloso donde todos nos sintamos orgullosos de ser colombianos.